Mis Visiones

He notado a lo largo de mi vida una sutil diferencia en las visiones de todo cuanto acontece en este mundo y la visión generalizada y aceptada por todos.

No es que quiera discutir con el resto del planeta sino que nadie tiene razones absolutas, pero se empeñan en creer que sí... y... por supuesto, alguien debe mostrarles sus confusiones y dejar ver otras visiones.

Puedo comenzar diciendo que el Amor ha sido confundido entre la gente, dándole valores diferentes y aplicando su nombre a infinidad de cosas superfluas.

Se le llama Amor al sexo cuando solo es un instinto naturalmente animal.

Se le llama Amor a la caridad, cuando esto es solo una necesidad, (tanto del que da como del que recibe).

Se le llama Amor a la piedad, a la condescendencia, a la pasión, a la lástima; cuando son diversas expresiones del yo ego.

He visto cómo se confunde el Amor con el fanatismo y he visto y oído al necio decir: - amo a mi líder -, cuando esto es admiración, cobardía, y falta de creatividad, por lo que estos necios ignorantes, se identifican con alguien que creen o proclaman superior a ellos.

Nada de esto es Amor y sin embargo así lo expresan.

Dicen Amar a su religión, dicen Amar su país, su bandera, pero también dicen Amar su equipo de fútbol o partido político etc.

 Yo digo que si esto fuese así, muchos serían los que Aman el dinero, la fama, el poder, etc.

Nada de esto es Amor.

 

 

 

Vengo pasando por este mundo ya cuarenta y seis años y he visto cómo la gente que lo habita vive en una ilusión creada por sus ancestros , acentuada y exagerada por ellos mismos. Nada se vive en la verdad, todo se vive en la ilusión. Los valores trastocados, confunden la realidad. No he conocido en toda mi vida, ni siquiera en televisión, alguien que no se considere bueno, acertado y poseedor de la razón verdadera.

En esta actitud de soberbia he visto caer al más noble y al más humilde. Y por supuesto, me he visto caer a mí mismo en estas y otras redadas de la vida. Así fue como he aprendido a ver y reconocer a los hipócritas, porque yo fui y a veces soy uno. No estoy exento de los errores que aquí acuso.

 Dividimos el mundo en bueno y malo, y solo es bueno, lo que nosotros consideramos bueno, así también obramos con respecto a lo malo.

 Hacemos divisiones de varones y mujeres y también acentuamos diferencias.

He tratado de ser amable y amoroso en mi visión, pero solo he visto soberbia.

Los daños psicológicos más potentes que veo, son los que ejercen los famosos diciendo su verdad como única he importante. Aquel que maneja un medio masivo, destruye las mentes con sus supuestas verdades que sólo son simples pareceres. Los famosos arrastran multitudes de mentes ignorantes con sus soberbias. Son como pastores conduciendo sus rebaños. ¿ Pastores de iglesias?, no, pastores de ovejas. ¿ Qué parecidos no?.

Hace ya muchos años que los famosos adquieren renombre por medio de la promoción más que por sus talentos. Pero si fuesen buenos actores o buenos cantantes, eso no asegura que sean sabios, personas ejemplares o que digan verdades sin errores.

De esta misma forma, también son peligrosos los periodistas en toda su extensión y magnitudes, pues estos nunca pueden evitar de ejercer su poder.

Golpean a quien esté de turno sin miramientos, creyendo que ejercieron la verdad. Así arman una especie de partido político con la gente que los sigue como partidarios. Luego que adquirieron fama, no importan las estupideces que diga, siempre lo aplaudirán. Se convierten en showman del periodismo.

Todo esto es peligroso y sin embargo sólo se toma como anecdótico.

 

 

 

He visto vanidades a montones, todas enmascaradas de humildad.

Jamás he visto una persona digna. A la madre Teresa de Calcuta la vi sólo en televisión o revistas. Igualmente me ha pasado con otras personalidades.

Será que he aprendido a ver claramente los defectos tanto como las virtudes y es así que veo ambos lados de las cosas.

A pesar de admirar personas como la antes mencionada, nadie es Santo de mi devoción y no acepto nada que haya que aceptar por creencia. Pocos saben que el saber intuitivo es más sabio que el cognoscitivo.

Y es por este saber que no necesito creer a ciegas.

Lo que me rodea me alcanza para comprender el todo. No necesito viajar miles de kilómetros para descubrir la vida en su totalidad. Me río de los que creen saber más, sólo porque han viajado más. Así también me río de los cultos que creen estar por encima del resto de la humanidad, sólo porque tienen muchos conocimientos adquiridos, cuando no tienen ninguno descubierto.

He encontrado en la mayor parte de la humanidad, basura. Y sin embargo confío en ella porque veo como puede evolucionar.

Hasta el más recalcitrante, necio y soberbio culto, puede alcanzar algo de sabiduría si adquiere un poco de humildad.

Los actos indecentes y genocidio ejercido a lo largo de la historia, en nombre de las culturas, las políticas y las religiones, hablan por sí solas de ellas mismas.

Todo aquel que defiende una cultura o a la cultura en general, es un agresor.

Sin embargo la historia nos trasmite el conocimiento del ejemplo, para no repetir errores.

Con el mismo cuchillo que usamos para cortar nuestros alimentos, podemos matar, aunque sea para defendernos, pues el arma que nos defiende, también mata.

El mismo avance tecnológico que nos da placeres y hace nuestra vida más cómoda, destruye la vida. Pero no estamos dispuestos a renunciar a ellos, pues generalmente, la muerte que provoca no siempre es visible, mientras que el confort que nos brinda, sí

 Podríamos hablar en este punto sobre depredación, ecología, o de la muerte prematura de los mineros y otros laboristas, pero no es el fin de este libro.

El hombre culto defiende la cultura, solo porque él la domina, y esta es una forma de sobresalir. Vanidad es lo único que poseen estos hombres incapaces de entender que un inculto es más sabio que él. Una cualidad para alcanzar la sabiduría es la humildad, sólo en boca de un culto humilde, la cultura cobra belleza. El soberbio utiliza la cultura para enaltecerse, pero primero está él.

 

 

 

El Arte es otra de las cosas que el hombre ha distorsionado, El partidario de una tendencia, critica la otra línea y la menosprecia, esta es nuevamente una forma de sobresalir. Menospreciar al otro es una forma fácil de enaltecerse sin tomarse el trabajo de evolucionar. Aquel que ejerce un Arte simple y sencillo, es despreciado, en vez de ser apoyado y enriquecido por el más evolucionado. Y así va degradándose el Arte, víctima de soberbias y vanidades.

No se trata de despreciar a Bach, sino de aceptar que Serrat nos regala más sabiduría.

Pero más allá de medidas, deberíamos ver que ambos son necesarios y no es más uno que el otro.

Una casa no se levanta con ladrillos, pues no sirven para nada por sí solos, ellos cobran sentido únicamentecon el cemento y este con la cal, el agua y la arena; y tampoco serían nada sin un hombre que los trabaje y ubique cada elemento en el lugar adecuado.

Cada cosa útil es necesaria, y cada hombre también. Todos sabemos que ningún doctor podría vivir sin el albañil que le construya la casa. Lo inútil, está siempre a la espera de ser utilizado.

Así, podríamos ver que absolutamente todo, tiene sentido de ser.

 

año 1999  Eloy F. Domínguez

 

 

 

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